Crítica: Loving Pablo

"A pesar de las sonadas expectativas acerca de este proyecto, empeño férreo de Javier Bardem, desde su estreno en el pasado Festival de Venecia, el aluvión absolutamente destructivo de críticas ha provocado la caída de un film, que de una manera sorprendente se está manteniendo a pesar de sus amplias sombras. Y es que la película ante la que nos encontramos es única en su especie. En primer lugar, el adjetivo que invade nuestra mente es el de fallido, pues parece que todo lo pretendido se ha ido perdiendo, quizás por un abuso excesivo de cierta estrategia de producción que ha imposibilitado las opciones creativas de un realizador como Fernando León de Aranoa. La pretendida seriedad de la cinta por la carga violenta de sus imágenes, se convierte en parodia, por numerosos elementos que juegan a ello. Desde un guion que maneja claramente la caricatura desde el minuto uno, y que encuentra en el personaje de Virginia Vallejo todas las virtudes para dibujar algo absolutamente culebronesco, hasta las apuestas técnicas más descabelladas (ese maquillaje abusivo, ese vestuario circense). Estos elementos juegan a construir una parodia deliciosa, que si bien, lejos se encuentra de esa película contundente sobre una figura tan controvertida como Escobar, si es cierto que resulta sumamente entretenida. Y en este sentido, la magia de dos actores tan inmensos como Javier Bardem y Penélope Cruz, capaz de dotar de magnetismo a dos personajes construidos con pulso débil y risibles aportaciones, es el mayor mérito de esta película. Ellos son el claro reclamo de un film que por fallido, resulta divertido y entretenido, pero que, seamos cautos, es la gran decepción del año."

Lo mejor: La inmensa capacidad de Javier Bardem y Penélope Cruz de otorgar magia donde no la hay.


Lo peor: El desastre generalizado de la propuesta, a pesar de ciertas virtudes.


NOTA: 5(***)

Contrastes del cine español. Reseñas:

La Chana:
"Es interesante advertir rarezas en nuestro cine, como la posibilidad de una visión extranjera sobre un arte tan enraizado como el flamenco. La islandesa Lucija Stojevic filma este particular retrato de la Chana, la que fuera la más grande bailaora de su tiempo, e intenta recuperar su valor y su esencia, a través de su aportación más personal, en una película rodada bajo los cánones de la digitalización más doméstica. Se agradece esta apuesta tecnológica en cuanto a la aproximación que permite hacia la figura de ella, y también en consonancia con un rotundo trabajo de montaje, que juega a dinamizar mucho el conjunto, dejándonos una cinta bastante atractiva. No obstante, hay ciertos hitos, y ciertas cuestiones que están tan clavadas a las entrañas de una tierra y un sentir, que es difícil encontrar en la mirada extranjera esa vibración requerida. Quizás de eso adolece esta cinta, de la falta de sentimiento, de la capacidad de contagiar la pasión de un arte tan profundo, quedando al final una apuesta ingeniosa, pero quizás excesivamente despojada de emoción."

NOTA: 6(***)

Perfectos desconocidos:
"Quizás el mayor éxito del cine español de 2017, con datos de audiencia absolutamente demoledores, es una cinta capaz de conectar con nuestra realidad más latente, en forma de crítica a la falta de intimidad que ha generado esta hecatombre tecnológica, y toda la esfera cibernética de las redes sociales. Con las limitaciones que supone reformular una obra precedente, Álex de la Iglesia adapta esta historia a su particular universo audiovisual, pero este proceso más que dar singularidad a la película, aporta un efectismo a veces excesivo. La película se fragua como un continuo vaivén en todos los sentidos, y por ende, cuesta conectar con una pelicula tan descompensada, que si bien nevega con acierto en las virtudes de su reparto, no siempre encuentra en el guion y en la dirección sus mejores apoyos. Todo ello resuelve una cinta efectista, facilona, sumamente entretenida, que trasciende más por la superficialidad de su mensaje, que por las aristas que esconde detrás."

NOTA: 5(***)