martes, 8 de enero de 2013

Crítica: The Master

 
SINOPSIS: Drama sobre la Iglesia de la Cienciología. Lancaster Dodd (Seymour Hoffman), un intelectual brillante y de fuertes convicciones, crea una organización religiosa que empieza a hacerse popular en Estados Unidos hacia 1952. Freddie Quell (Joaquin Phoenix), un joven vagabundo, se convertirá en la mano derecha de este líder religioso. Sin embargo, cuando la secta triunfa y consigue atraer a numerosos y fervientes seguidores, a Freddie le surgirán dudas.



COMENTARIO 
CRÍTICO:
"Paul Thomas Anderson, conocido por marcar una línea diferente dentro de la industria norteamericana, vuelve con un film arriesgado, provocador en cierto sentido y cargado de fuerza. Su vuelta al Séptimo Arte prometía un espectáculo estremecedor de imágenes y así ha sido. Este drama sobre la superación de un hombre y su encuentro con la iglesia de la Ciencielogía funciona perfectamente desde el primer minuto de metraje. La cumbre de la obra y su perfecto funcionamiento se lo debe a un guion preciso en la definición de personajes y endiabladamente crítico con lo que ofrece sin caer en maniqueísmos, ni lirismos oportunos. Su pulso es constante y elabora un conjunto de imágenes, que gracias a la solvencia dirigiendo de Anderson, consiguen desarrollarse de una forma extraordinaria. Al margen de que la obra pueda interesar en mayor o menor medida, es incuestionable la grandeza de muchas de sus imágenes, perfectamente encuadradas y compuestas, una absoluta lección de gran cine. Esta resolución tan acertada del contenido visual de la película le debe mucho a un equipo técnico realmente extraordinario, donde destaca un perfecto montaje, una conseguida ambientación, una acertada fotografía, pero sobre todo una música original, cargada de fuerza y decisión que acompaña de forma perfecta a esa sucesión de estimulantes imágenes. Aunque si algo estimulante tiene este film, es su reparto, en especial esa endiablada Amy Adams, revestida de dulzura, o la perfecta composición definida con valentía por Philip Seymour Hoffman de forma sobresaliente, sin olvidarnos de un Joaquin Phoenix que con su extrema definición, consigue explotar las emociones del espectador ante una conjugación tan perfecta de inquietudes y sentimientos en un solo personaje. Ellos tres son los potentes pilares de una obra extraordinaria, capaz de recoger momentos que hacen historia en el Séptimo Arte."

NOTA: 9(*****)

1 comentario:

Alvaro dijo...

No es River Phoenix. Es Joaquin Phoenix.

Su hermano por desgracia murió hace 20 años.